Los
estándares y certificaciones de la NFPA están presentes en el istmo así como en
el resto del mundo.
Si alguna vez has escuchado
hablar de los sistemas de protección contra incendios en el contexto de un
proyecto de construcción o inmobiliario, seguramente has oído a alguien nombrar
a la NFPA, por sus siglas en inglés.
La National Fire Protection Association, o la Asociación Nacional de
Protección contra el Fuego, es una organización internacional responsable de
establecer y actualizar las normativas y requisitos básicos para la seguridad y
prevención contra fuegos. También es la entidad que capacita a profesionales de
todo tipo para la correcta instalación y manejo de estos sistemas y equipos.
La NFPA se encuentra en
Estados Unidos y fue fundada hace más de 120 años por iniciativa de representantes
de compañías de seguros. A finales del siglo XIX la revolución industrial
estaba en todo su apogeo, los centros urbanos estaban creciendo y las
infraestructuras antiguas –generalmente de madera– representaban una fuente
constante de peligro. Nuevas tecnologías para la protección contra incendios se
estaban desarrollando, y con el objetivo de fomentar su uso se logró crear
conciencia para que fueran incorporadas en los procesos de diseño y
construcción de todo tipo de edificaciones.
En los comienzos del siglo
XX la NFPA creció y se estructuró, llegando a incluir como miembros a
profesionales de cuerpos de bomberos, sindicatos de la industria de la
construcción, compañías de seguros, asociaciones profesionales e incluso
representantes de las empresas que manufacturan los equipos que se utilizan
para estos propósitos. Aunque es una entidad independiente estadounidense, la
influencia de sus estándares se ha hecho presente a través de “Capítulos Nacionales”
en diversos países de la región latinoamericana, encargados de integrar a todos
los participantes de esta industria para estar alineados y actualizados en las
normativas a seguir y aplicar. En este sentido es muy parecida a la FDA, o Food and Drug Administration, cuyos
estándares para alimentos y medicinas son seguidos en varias regiones del
mundo.
La NFPA desarrolla los
códigos y normas que listan las recomendaciones para las prácticas más seguras
de instalación y mantenimiento de los sistemas de protección contra incendio.
Son más de 300, y todas son desarrolladas por personal experto en la materia a
través de una constante aplicación de pruebas y ensayos. Su importancia es la
estandarización o unificación de los criterios que se usen para el diseño y
construcción de estos sistemas en cualquier tipo de edificación.
En Panamá, donde se carece
de una normativa interna independiente para este tema, se usan como referencia
los códigos de la NFPA para diseñar cualquier sistema para combatir fuegos, los
cuales sirven de guía bomberos y otro personal encargado de la seguridad de una
edificación.
El Benemérito Cuerpo de
Bomberos de Panamá es la entidad nacional responsable y con la autoridad para
certificar la correcta operación de un sistema instalado, y todos los proyectos
relacionados a ellos también deben ser previamente revisados y evaluados por
los bomberos. De esta forma se asegura que los equipos serán técnica y
funcionalmente eficientes, además de cumplir con las normativas aplicables de
la NFPA.
Cabe destacar que las
empresas que instalan y comercializan equipos de protección contra incendios necesitan
contar con una debida licencia para realizar estos servicios. Esto se logra
mediante una resolución que emite la Dirección Nacional de Seguridad,
Prevención e Investigación (DINASEPI) del Cuerpo de Bomberos, la cual
claramente señala los productos (incluyendo marcas) y servicios detallados que
cada empresa o proveedor está capacitado para ofrecer.